El deceso del pedalista paceño Gabriel Capriles, que perdió la vida el año pasado en una competencia de descenso en la ciudad La Paz, fue la gota que rebalsó el vaso en la federación de este deporte, por lo que se obligó a los dirigentes a tomar medidas drásticas respecto a este tema.
Por ello, el pasado 16 de febrero, emitieron un voto resolutivo, donde advirtieron a los ciclistas, de ruta, pista, bicimontaña, BMX y ciclo-cross, que no participarán de torneos departamentales, nacionales e internacionales, si no cuentan con el seguro Bisa contra accidentes.
Edgar Herrera, presidente de la FBC, explicó que gracias a las gestiones del ingeniero Jorge Zamora, gerente regional de Bisa, la federación consiguió un importante descuento en la póliza. Indicó que antes ésta tenía costo de 30 dólares anuales, empero para este año se redujo a 21,50 dólares, equivalente a 150 bolivianos.
A este monto tiene que sumarse los 50 bolivianos que cobra la federación, al año, por la licencia para cada pedalista. Por tanto, ahora el ciclista tiene que hacer un gasto anual de Bs 200 para acceder al seguro y la licencia, y así poder competir en los diferentes campeonatos.
Respecto a los beneficios del seguro, Herrera informó que el deportista tiene 500 dólares para gastos de recuperación y 5.000 dólares en caso de muerte o invalidez. Además, resaltó que se puede duplicar o triplicar el beneficio de la póliza.
“Pagando Bs 300 pueden acceder a doble póliza, que sería: 1.000 dólares para gastos de recuperación y 10.000 por muerte o invalidez, y también pueden triplicar, eso depende del ciclista”, dijo.
Comentó que la federación tomó esta determinación porque durante la gestión 2015 se registraron 18 casos de accidentes con fracturas, y en la mayoría los ciclistas no cuentan con los recursos para pagar su recuperación.
“No queremos ya pedir limosnas. Cuando tenemos un accidente a los delegados pedimos colaboración, unos ponían Bs 10 cuando la operación cuesta hasta 1.000 dólares, además que no teníamos apoyo del Servicio Departamental de Deporte”, apuntó. Luego, señaló que una recuperación de fractura de clavícula cuesta cerca de 500 dólares.
El dirigente ejemplificó un caso que también ocurrió el año pasado, cuando dos días antes del nacional en Potosí, uno de los pedalistas de Santa Cruz se cayó durante los entrenamientos y tuvo que ser evacuado de emergencia a un hospital cercano.
“Gracias a Dios no pasó a grandes, sólo un desmayo prolongado. Pero no tenía seguro. Y su recuperación le costó Bs 600. Qué le costaba pagar el seguro (Bs150) y gozar de los beneficios”, agregó. Entretanto, anunció que el año pasado registraron a 800 pedalistas con seguros, y que esta gestión se pretende sobrepasar los 1.000. Acotó que la mayoría de los asegurados son de la modalidad BMX y bicimontaña.
Además, resaltó que en el último congreso de la Unión Ciclística Internacional (UCI), en octubre de 2015, se determinó que todos los ciclistas del mundo tienen la obligación de contar con seguros de vida contra accidentes, ya que existieron reiteradas eventualidades en los diferentes países.
¿Qué pasa si un ciclista no tiene seguro?
Pese a la resolución de la FBC, Herrera indicó que si un ciclista quiere competir sin seguro, éste debe firmar un documento donde se responsabiliza de cualquier eventualidad durante la carrera, y que corre con todos los gastos de recuperación.
Recomendó que esta situación no es lo más aconsejable porque la FBC manda una circular a las asociaciones, una semana antes, para que los pedalistas puedan comprar su seguro Bisa que tiene validez 48 horas después de su compra.
“TODOS DEBEN TENER SEGURO”
El ciclista potosino Juan ‘Cóndor’ Cotumba comentó que todos los ciclistas deberían contar con seguro contra accidentes, ya que tiene muchos beneficios. “Se hace un gran esfuerzo para adquirir (los seguros), pero los beneficios son grandes porque a veces tenemos caídas, en este deporte hay gente de escasos recursos y no puede cubrir las recuperaciones”, dijo.
Cotumba señaló que ayuda un poco a la economía de los deportistas que el costo de la póliza haya bajado de 30 dólares a 21,50 dólares; sin embargo, comentó que la cruda realidad de algunos no les permite tener acceso a este seguro.
Puso como ejemplo la ciudad de Sucre, que cada fin de semana se desarrollan competencias dominicales con el fin de recaudar fondos para las delegaciones que participan en torneos nacionales. “De las inscripciones sacamos para los pasajes, agua y alimentación.
En nuestro país el apoyo es poco y casi nada. Los ciclistas siempre tenemos que comprarnos seguros, licencias, pagar inscripciones”, apuntó.
Añadió que todavía no compró su seguro, pero espera hacerlo en las siguientes semanas o antes de una campeonato nacional. “Es un gasto que el ciclista tiene que hacerlo porque al final de cuentas es para beneficio de uno mismo, porque cuando tienes un accidente debes correr con los gastos, ni la federación ni la asociación cuentan con recursos”, finalizó.
REQUISITOS
Edgar Herrera, presidente de la Federación Boliviana de Ciclismo (FBC), explicó que los deportistas mayores de 18 años pueden acceder sin problemas al seguro contra accidentes de Bisa, entidad con la cual existe un convenio. Sin embargo, los pedalistas menores de edad deben solicitar la póliza mediante sus padres o tutor.
Señaló que no es requerimiento necesario que sea el padre el solicitante, ya que en varios casos los tutores son los que hacen la representación.
Sin embargo, recomendó a los ciclistas elegir a una persona responsable a la cual dejarán como beneficiaria en caso de muerte, ya que será la encargada de recibir el monto total de indemnización.
Por otra parte, mencionó que para los deportes de alto riesgo: ciclismo, automovilismo, motociclismo, paracaidismo y otros, es difícil conseguir que los seguros cubran accidentes durante las competencias. Por ello, agradeció a Bisa seguros, ya que se adecuó a los requerimientos de estas disciplinas.
En este sentido, reconoció que hubo un pequeño conflicto con los ciclistas, ya que se compraban seguros por su cuenta o tenían el beneficio de otras entidades, pero éstas no cubrían los gastos en accidentes durante eventos deportivos de alto riesgo. “Nosotros no queremos que pasen por conflictos, porque algunas empresas les hacen devolver el dinero cuando se enteran cómo se accidentaron”, dijo.
ANTECEDENTES
En 2010, el Campeonato Nacional de Ciclismo de ruta acabó en tragedia por al fallecimiento de Milton Clares Villca, de La Paz, quien sal caerse en plena competencia se golpeó la cabeza y murió en el acto.
El hecho ocurrió a la altura del kilómetro 70 en la ruta Kinray-Potosí, cuando Clares se encontraba de retorno en un sector de bajada vertiginosa, se cayó e impactó en la barra protectora de la carretera, la fuerza del golpe quebró su casco y su cabeza ocasionándole el deceso instantáneo.
La ambulancia y los médicos coincidentemente estaban detrás del ciclista, empero no pudieron hacer nada; de inmediato el cuerpo ya sin vida fue trasladado a la morgue del hospital Daniel Bracamonte.
Si bien la convocatoria señalaba que la Asociación de Potosí, organizadora del evento nacional, no se responsabiliza por accidentes que pudieran ocurrir antes, durante y después de la competencia, la Federación Boliviana de Ciclismo (FBC) se hizo cargo de todos los gastos.
Ante este panorama, los ciclistas orureños y del resto del país exigieron, en ese entonces, al Viceministerio de Deportes la contratación de un seguro de vida para cada pedalista que compita en torneos locales, nacionales e internacionales.
Edgar Herrera, titular de la federación de este deporte, contó que el pedalista Luis Reque (2003), que falleció en competencia en la carrera “Doble Potosí-Sucre”, contaba con el seguro y sus familiares cobraron el beneficio, al igual que su coterráneo Álvaro Montaño.
APOYO
Tras el comunicado emitido por la Federación Boliviana de Ciclismo, Sonia Ramos, presidente de la asociación de Potosí, dijo que el tema del seguro debe verse como una inversión y no cómo un gasto de los ciclistas.
Recordó que el año pasado la Villa Imperial fue escenario de un accidente donde fueron afectados dos ciclistas, uno de ellos, por falta de recursos económicos no fue operado a tiempo y ahora está en rehabilitación en la sede de gobierno para volver a caminar.
“Los ciclistas deben pagar de manera anual (por año) 150 bolivianos y en caso de sufrir algún accidente ya sea en entrenamiento o en competencia la aseguradora se hará cargo de los gastos médicos”, comentó Ramos a un medio de comunicación de Potosí.
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