El campeón cae. Cavendishi y su maillot arco iris de campeón del mundo, sus 175 centímetros, se fueron a tierra cuando el sprint comenzaba a gestarse y el campeón del mundo entró en la meta de paseo. Su sprint más lento. Cariacontecido, serio, sin palabras. Con un gesto cerrado que decía todo. Se marchó sin decir nada. Guardó silencio para velar armas.
El campeón del mundo no se dañó demasiado y no tendrá problemas para continuar en carrera.
"Le deseo que no sea nada", lanzaba Greipel desde el podium de su triunfo, un tanto molesto porque todas las preguntas hicieran referencia a la ausencia de su rival.
Greipel ganó cómodo. Se subió al tren de su equipo, el Team Lotto, que le llevó en primera categoría hasta la meta.
"En este equipo me siento bien, somos nueve amigos", resumió, exultante, el enorme alemán de 1,83 metros, que suma ya 14 triunfos esta temporada.
Y con la de ayer son dos seguidas, a ver hoy si volvemos a ver a Cavendish a tope.
ResponderEliminarSaludos desde Paseo Melancólicos