Stybar impuso su maillot de campeón del ciclismo de barro al arco iris del asfalto de Gilbert. Por milímetros, pero la foto de llegada eligió al ciclista del Omega, quien levantó los brazos celebrando su debut en el palmarés de la Vuelta, y en homenaje a Tony Martin, su compañero alemán frustrado un día antes por no rematar su famosa escapada de 175 kilómetros por apenas 10 metros.
De los caminos de fango al asfalto. Cuestión de adaptación. Stybar cambia de ruta y sigue ganando.
La séptima etapa entre Almendralejo y Mairena del Aljarafe, de 205,9 kilómetros estaba señalada para el esprín, según el catálogo. Y se cumplió, aunque sólo esprintaron dos.
Hoy, se disputa la octava etapa entre Jerez de la Frontera y el Alto de Peñas Blancas, de 166 kilómetros.
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